ARCA DE NOE: Descubriendo el yarnbombing

¡¡¡Hola chiquis!!!

Ya hacía unos meses que no me pasaba por aquí, y es que tengo mi pequeña arca un poco descuidada. Pero vengo a ponerle solución :-)

Este sábado hice una pequeña excursión por el norte de Portugal. Concretamente, una de las paradas fue en Vilanova de Cerveira y, a pesar de no ser un pueblo muy grande, tiene muuuuucho encanto. Os cuento por qué: la finalidad de la parada era hacer algunas compras en la feria que organizan allí y que tiene mucha fama por la cantidad de puestos que la forman y las gangas que puedes encontrar.

Cúal fue mi sorpresa, cuando al llegar me encontré con los árboles "vestidos" de crochet. ¡¡Me quedé sorprendidísima!!

Y a medida que me adentraba en las calles del pueblo descubrí que no solo los árboles, también los balcones, las terrazas de las cafeterías, las verjas de los parques...

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**Por problemas técnicos a penas pude sacar fotos, y las que hay no tienen mucha calidad, pero en la red hay varias páginas que dedican post y fotos a este pueblo. En concreto os recomiendo esta página, dónde podréis ver fotos espectaculares y más detalladas.

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No os voy a mentir, cuantas más cosas crocheteadas veía, mayor era el gusanillo de volver a retomar el ganchillo. Con tanta lana y trapillo me hacían los ojos chiribitas.

Al llegar a casa, evidentemente, me puse a invesitgar, lo cierto es que ya había visto cosas así por la red, pero como no lo había visto en vivo y en directo, no le había dado importancia. El caso es que es un movimiento más grande del que imaginaba, y por medio mundo ya está en marcha el conocido yarnbombing. Su finalidad, la que ya os he dicho: vestirlo todo con lana. Os dejo algunas fotos, que por originalidad o colores, me han encantado:

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Lo de los árboles realmente me parece impresionante, los visten de una forma adorable, y lo mejor de todo, ellos no sufren ningún tipo de daño, ya que se puede quitar facilmente.

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Y ahora le toca el turno a los originales :D

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Y por último, hago una mención especial al que más cerca me toca, y es para el guerrero romano que preside el museo de la Domus en A Coruña. El pobre va casi en cueros, por lo que un grupo de crocheteras muy majas se decidieron a hacer un abrigo muy especial para él.